Es posible que tu vida hasta ahora sea un cúmulo de relaciones fallidas, de ilusiones truncadas. ¿Te gustaría que el desamor terminase?¿Quieres que ese géminis o esa géminis se fije en ti? Desde este artículo sabrás como poner fin a tu mala suerte en el amor y lograr el corazón y la voluntad de quien tanto y tan profundo amas.
Introducción
Si tu corazón suspira por una persona géminis, has de saber que éstos suelen desarrollar una personalidad compleja y hasta cierto punto reservada y cambiante en ocasiones.
Es cierto. Seducir el corazón de un géminis puede ser complicado y catastrófico para quien se enamora y no es correspondido. Para lograr seducir a una personalidad géminis o incluso lograr un amarre más profundo y férreo, si nuestra pareja es Géminis, nada mejor que un ritual de amor enfocado para dicha personalidad.
Ritual de amor para seducir al signo Géminis
Para realizar un ritual de amor para un Géminis debemos concentrar todas nuestras energías en torno a dicha persona. Focalizar todos nuestros sentimientos en un solo punto y proyectar nuestros sentimientos hacia su figura.
Es importante también visionar nuestra existencia al lado de esa persona. Imaginar que lugares visitaremos y que actividades realizaremos. Una vez focalizado el hecho y transcendidos los sentimientos, debemos realizar un amarre de amor fuerte.
En el caso de los Géminis, deberemos utilizar una vela rosa y otra blanca, una simboliza la perfección del amor y la blanca la iluminación espiritual.
Géminis es un signo de aire, poderoso y de una gran trascendencia espiritual. Debemos por ello utilizar, en nuestro conjuro, elementos de una energía parecida.
En este caso el metal alquímico de la Casa Astral de Géminis es el hierro, por ello nuestra ceremonia consistirá en una consagración del metal que lo representa, en el elemento de la pureza (agua) y con la trascendencia del elemento (viento).
Desarrollo del ritual de amarre de Géminis
Debemos elegir una noche de luna llena. Debemos optar por un lugar silencioso y tranquilo. Las dos velas acompañarán la luz de la luna y estos tres elementos de luz simbolizarán nuestra iluminación y también la iluminación del corazón del sujeto a quien invocamos en la ceremonia.
Debemos utilizar un cuenco de barro colmado de agua, en el que debemos meter el fragmento de hierro. Invocaremos hasta tres veces su nombre y su recuerdo. Es esencial, también, visualizar situaciones y recuerdos que tengamos a esa persona.
A través de nuestras manos, y con el fragmento metálico sumergido en el agua, debemos tocarlo dentro del líquido elemento. De esta manera, nuestra energía, nuestros pensamientos y nuestros sentimientos serán transmitidos al agua y a la pieza metálica.
Después nos retiraremos y dejaremos que las velas se consuman. No debemos apagarlas, ya que ello supondría el advenimiento de la oscuridad en la futura relación.
Cuando amanezca sacaremos el fragmento metálico del agua y lo llevaremos con nosotros. De este modo veremos como la persona poco a poco va cambiando de actitud con respecto a nosotros.
Además, tras el ritual observaremos como ganamos confianza y seguridad en nosotros mismos, una vez visto y focalizada nuestra vida a su lado y la felicidad que ello puede suponer, de una manera implícita cuando veamos a esa persona estaremos proyectando ese tipo de energía hacia él.
Será importante, por último, no olvidar llevar el fragmento de metal con nosotros durante un tiempo. Nuestras expertas tarotistas recomiendan llevarlo hasta que la relación tome forma y se asiente.